El yermo inicial...
Pero pese a la desolación, no faltó la sonrisa:
El caos,
Las cuatro fantásticas de Nidolab,
Los preparativos del famoso techo,
El dúo de pasteleros asistentes,
La larga procesión de blondas routeadas,
Y su parsimoniosa colocación...
Con sus admirables resultados:
En la producción de la postal, un intruso en los macarons:
Y luego el punto cruz para la esterilla bordada: una revolucionaria forma de tortura.
La pegatina de macarons,
El arte de Bü,
Los últimos detalles:
La silla Paka, de las Nidolab, con sus múltiples ocupantes:
¡El resultado final!
El brindis por la mención recibida (¡merecida!),
Los delantales de Violraviol,
Las bolsas estampadas por Leslie,
El equipo en acción,
Durante el prolongado transcurso, la mirada interna:
Y por fin el anticlimático final: destruir con las propias manos lo que con tanto esfuerzo se había logrado.
Por último, un montón grande de gracias a todos los que nos ayudaron a sobrevivir a tamaña empresa: Juampi; Leslie (y Juan, por supuesto); Pablo (Ambiente 3); Sofi; Ceci (Violraviol) y su hija y futura pastelera Viole; Bü (Bü); Nidolab (Sol, Flor, Vero, Lu); ambos pares de padres (Omar, Mónica, Hugo, Silvina) y todo el formidable equipo de FOA que nunca quedó en deuda (desde Inés y Popi hasta Mario y Jorge, pasando por Johanna, María, todo el equipo de seguridad y de limpieza y muchos más).
El Fin de FOA deja a Les Croquants sin anclaje físico una vez más, pero (shh, no le digan a nadie) dudamos que siga así por mucho tiempo. ¡Así que atentos todos!
Salut!
Les Croquants
(y, obvio, la invitada estrella)
